Fuente: El Periódico de la Energía
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado una serie de modificaciones que afectarán directamente a los bolsillos de los consumidores. La medida más destacada es el aumento del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) de la luz y el gas, que pasará del 7% actual al 10%, a partir de ahora hasta el final de 2024. A partir de 2025, el IVA experimentará una nueva subida, situándose en el 21%.
En el ámbito de la electricidad, el Gobierno establecerá varios tipos impositivos durante el año 2024. El IVA del 10% se aplicará a lo largo de todo el año, mientras que el Impuesto Especial de la Electricidad (IEE) variará del 2,5% al 3,8% en distintos trimestres. Asimismo, el Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica (IVPEE) oscilará entre el 3,5% y el 5,25% en diferentes periodos del año.
En cuanto a los suministros de gas natural, el IVA aumentará al 10% en los primeros tres meses de 2024, manteniéndose en ese nivel para los combustibles de biomasa durante seis meses. Los suministros de calor seguirán la misma pauta, dependiendo de su origen fósil o renovable.
Consumidores vulnerables
Sin embargo, el Gobierno ha anunciado que se mantendrán algunas disposiciones hasta el 30 de junio de 2024 para proteger a los consumidores vulnerables. Estas incluyen la prohibición de interrumpir por impago los suministros básicos de electricidad, agua y gas natural, así como descuentos significativos en el bono social eléctrico para diferentes categorías de consumidores vulnerables.
Además, se preservarán los límites aplicados al crecimiento de la Tarifa de Último Recurso de gas (TUR), que evitan un aumento excesivo del coste de la materia prima. También se mantiene la TUR vecinal para comunidades de propietarios con calefacción central de gas natural, y el precio máximo del butano se establece en 19,55 euros por bombona.
Para alivio de los consumidores, los cargos de la electricidad se mantendrán en niveles bajos durante todo 2024, alrededor de un 55% por debajo de los niveles de 2021. Esto se presenta como un beneficio especialmente significativo considerando el contexto de incertidumbre generado por el conflicto en Ucrania.
Asimismo, se ha extendido seis meses más la reducción del 80% de los peajes de la industria electrointensiva, así como la flexibilización para modificar la potencia eléctrica contratada y los contratos de suministro de gas.
