Fuente: INVERTIA
Los precios del petróleo Brent han regresado al nivel de los 80 dólares por barril, impulsados por la adhesión de la OPEP+ a los límites de producción, nuevas sanciones a Rusia e Irán y un mayor optimismo sobre las perspectivas económicas de China.
Esta es la principal conclusión del análisis realizado por la consultora especializada en energía AleaSoft Energy Forecasting. “Desde principios de año los precios han subido un 8,5%, están ya otra vez en un nivel por encima de los 80 dólares, en concreto en 81,7 dólares, y van a continuar este nivel”, señala.
El cambio de tendencia se debe a “nuevas sanciones a productores como Rusia e Irán, que básicamente lo que hacen es restringir el suministro de gas”. También los países que pertenecen a la OPEP+, “que se marcaron mantener los cortes de producción por lo menos hasta abril, algo que no suele ocurrir, están cumpliendo, y por tanto, la producción se está manteniendo a raya”, añade.
Y el último factor determinante es el cambio de tendencia en la economía china, que ahora es más optimista. “Se espera más demanda, por tanto, es una combinación para que los precios suban”, según el análisis.
Inventarios internacionales
El clima más frío y la perspectiva de sanciones más duras contra Rusia y China significan que el excedente en las reservas mundiales de petróleo probablemente será menor en 2025 de lo que se pensaba anteriormente, escribe la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en su informe mensual sobre el mercado de esta commodity.
La AIE ha realizado un aumento marginal en su pronóstico para el rendimiento de las refinerías mundiales este año, impulsado por el “desempeño resiliente” de las plantas estadounidenses y europeas.
El organismo internacional espera ahora un rendimiento mundial de crudo de 83,4 millones de b/d en 2025, mientras que su proyección anterior era de 83,3 millones de b/d.
“Aunque nos volvemos más positivos en cuanto a las perspectivas a corto plazo, es importante reconocer que las refinerías europeas siguen bajo presión”, indica el análisis.
Y esto es “debido a los cambios en los patrones comerciales, el aumento de los costes del carbono, el aumento de los gastos de energía y los inminentes cierres de capacidad“, ha dicho la AIE en su último Informe sobre el mercado petrolero (OMR).
Las previsiones para 2025 de India, China, Pakistán, Filipinas y Singapur se han reducido en comparación con la OMR del mes pasado. La AIE espera ahora que la producción china aumente en 240.000 b/d hasta 14,8 millones de b/d este año. La previsión del mes pasado preveía un aumento de la producción china hasta 14,9 millones de b/d.
“2025 podría resultar otro año desafiante para las refinerías independientes chinas, a pesar del aumento de las cuotas de importación de crudo, ya que los aranceles de importación más altos reducen la rentabilidad y las recientes sanciones estadounidenses afectan el acceso a los barriles rusos e iraníes”, ha asegurado la agencia.
Y a todo este coctel, hay que sumarle las bajas temperaturas del invierno que están soportando en el hemisferio norte. Los grados de calefacción medios están siendo significativamente más altos que hace un año y ligeramente superiores a la media de los últimos cinco años.
La Flota de la Sombra
Los precios también se han visto impulsados las nuevas sanciones contra Rusia, más amplias, y anunciadas el pasado 10 de enero, que pueden afectar los flujos de suministro de petróleo.
Washington apuntó a dos importantes productores de petróleo (Gazprom Neft y Surgutneftegaz), más de 160 buques cisternas que transportaban petróleo de Rusia, Irán y Venezuela y a aseguradoras de buques, lo que ha complicado aún más la logística del comercio de petróleo para esos países.
Al mismo tiempo, se especula cada vez más con que la próxima administración estadounidense, en manos de Donald Trump, adoptará a partir de este 20 de enero una postura más dura respecto a las exportaciones petroleras de Irán.
El pasado 19 de diciembre, Joe Biden amplió las sanciones a ciertos buques que transportan crudo iraní, también conocidos como Flota paralela en la Sombra, que suponen casi un tercio de las exportaciones de crudo del país persa.