Fuente: El Economista
La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) asegura que en 2024 se instalaron 1.182 MW de autoconsumo fotovoltaico, lo que supone 51.306 viviendas, lo que supone que ya acumulan 8.137 MW. Este dato supone un retroceso del 31% repecto al ejercicio anterior.
Según los datos recogidos por la asociación sectorial, el autoconsumo industrial fue el ámbito con mayor nueva potencia instalada en 2024, con 674 MW, de los cuales 578 MW corresponden a los proyectos industriales de más de 100 KW y 96 MW a proyectos industriales de menos de 100 KW, si bien se aprecia una reducción del 34% de potencia instalada con respecto a 2023.
UNEF atribuye esta caída del segmento industrial al amplio periodo de maduración de estos proyectos en relación con otros menores, como los residenciales, lo que hace que la reducción que se apreció el pasado año en residencial, destaque ahora con más intensidad en el industrial.
En cuanto al resto de sectores, se registran 207 MW de autoconsumo en el sector comercial y 275 MW en el residencial.
Desde UNEF achacan esta ralentización a la desaparición de los dos motores fundamentales que incentivaron de forma excepcional el incremento de los años anteriores, como son los precios muy altos de la energía y las subvenciones incluidas en el programa Next Generation.
“El autoconsumo sigue siendo una opción altamente rentable para industria, comercios y hogares, ya que la electricidad sigue registrando unos precios elevados en comparación con el periodo anterior a la crisis. Sin embargo, ha desaparecido en los consumidores la percepción de que esto es así, lo que, unido a la finalización del programa de subvenciones; ha rebajado la urgencia mostrada en años anteriores por los consumidores de buscar alternativas que supongan un ahorro energético”, comentó José Donoso, director general de UNEF.
UNEF reclama al Ministerio de Transición Ecológica la exención del permiso de acceso y conexión para cualquier instalación que, aun teniendo mayor potencia instalada, no inyecte a la red más de 15kW, para instalaciones de baja tensión, o hasta 100 kW para instalaciones de media y alta tensión. También pide extender la posibilidad de la tramitación simplificada de los 100 kW de potencia instalada actuales a los 450 kW de capacidad de acceso, lo que permitiría a estas últimas acogerse al mecanismo de compensación simplificada, la posibilidad de modificar el contrato de acceso directamente por las distribuidoras a partir de la información remitida por las Comunidades Autónomas o revisar la política de retribución de excedentes para hacerla más atractiva. Solicitan a su vez incluir al autoconsumo unido a bombas de calor o a almacenamiento como actuaciones estandarizadas para la obtención de los certificados de ahorro energético (CAEs).
La patronal considera que es necesario que aquellas Comunidades Autónomas que aún no eximen a las plantas de autoconsumo de menos de 500 kW de pedir la Autorización Administrativa Previa y de Construcción (Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón, Cataluña, Valencia, Baleares, Galicia, Cantabria, Canarias y La Rioja), implementen cuanto antes esta exención.