Fuente: El Economista
El presidente del Foro Nuclear, Ignacio Araluce, ha pedido hoy al Gobierno que abra un proceso de negociación para prolongar la vida de las centrales nucleares españolas y afrontar así los 2.000 millones de más que cuesta el nuevo plan de residuos nucleares.
Para Araluce, el Ministerio de Transición Ecológica debería ser más “flexible tras las situaciones que hemos vivido, como una pandemia global de la que todavía se está recuperando la economía”.
Según indicó el directivo, la propuesta del Gobierno de incrementar la tasa de Enresa en un 40% supone saltarse el Protocolo de cierre pactado en el año 2019, lo que en opinión de Araluce les habilitaría para solicitar una prórroga de vida de las plantas.
El Foro ha pedido al Ministerio que aporte los datos económicos de Enresa que justifiquen el fuerte incremento de la tasa, que pretende pagar los 2.000 millones más que cuesta el nuevo Plan de gestión de los residuos nucleares. Para ello, ha solicitado una ampliación del plazo de alegaciones con la intención de poder plantear correctamente la posición del sector.
Por el momento, según explica Araluce, el Ministerio no ha dado respuesta a esta petición y aseveró que el sector no es “una vaca lechera” y que no puede afrontar los cambios de política del Gobierno como en el caso del ATC de Villar de Cañas. Para el Foro Nuclear destaca también la falta de detalles sobre la gestión del dinero del fondo que gestiona Enresa para el desmantelamiento de las centrales y afirmó que este año hay menos dinero que el anterior y eso que se han aportado los 450 millones anuales.
Para el Foro Nuclear, la vida de las centrales podría prolongarse durante quince años más con una inversión del orden de 3.000 millones de euros.
Esta medida permitiría también eludir la subida de esta tasa, facilitaría la reducción de emisiones de CO2 y contribuiría a entregar a los clientes una electricidad más barata. Para el Foro Nuclear, la política energética española es como un coche que va en sentido contrario al del resto de países europeos y puso como ejemplo el respaldo otorgado a la energía nuclear en la última COP29 en Dubái, donde logró el apoyo de 28 países.