Fuente: El Economista
Mientras que las centrales de Almaraz y Ascó tienen sus días contados, sus hermanas gemelas aspiran a durar hasta 2060. La Comisión Reguladora Nuclear ha renovado por segunda vez las licencias de explotación de las unidades 1 y 2 de la central de North Anna por 20 años más. Este modelo de instalación es el referente usado para las centrales españolas de Almaraz (Cáceres) y Ascó (Tarragona), según indicó Foro Nuclear, dos generadoras eléctricas que tienen previsto echar el cierre en 2028 y 2030, respectivamente.
En concreto, las unidades de North Anna son reactores de agua a presión situados en el condado de Louisa, en el estado de Virginia. Con la última actualización de licencia de la Comisión Regulatoria Nuclear (NRC, por sus siglas en inglés), el permiso de operar de la Unidad 1 expirará el 1 de abril de 2058 y la de la Unidad 2 el 21 de agosto de 2060.
Foro Nuclear indica que en Estados Unidos, cuando comenzó el desarrollo de su programa nuclear, la Nuclear Regulatory Commission (NRC) concedía las autorizaciones de explotación por un plazo de 40 años. Una vez cumplidos los primeros 20 años de operación, las empresas propietarias de las centrales pueden solicitar operar durante 20 años adicionales hasta alcanzar los 60. Actualmente, de los 94 reactores en funcionamiento en el país, 81 ya tienen concedida una autorización de explotación para 60 años.
North Anna cubre el consumo eléctrico de 450.000 hogares y da empleo a 900 personas, según datos de la empresa operadora, Dominion Energy. Sus dos unidades comenzaron su operación en 1978 y en 1980, respectivamente. En la actualidad, Estados Unidos suma ocho reactores nucleares con autorización para operar durante un total de 80 años.
Últimos coletazos
Las centrales nucleares de Ascó y Almaraz están ante sus últimos coletazos. Enresa, la sociedad pública encargada de la gestión de residuos radiactivos, inició el proceso de licitación de los servicios de ingeniería para desmantelar la central nuclear de Cáceres a finales de junio por 28 millones de euros. La propiedad de esta instalación es en un 52% de Iberdrola Generación Nuclear; en un 36% de Endesa Generación y de Gas Natural Fenosa Generación en un 11%.
Por su parte, la de Tarragona, que pertenecen en un 85,41% a Endesa y en un 14,59% a Iberdrola; tienen concedida la renovación de la autorización de explotación hasta el 2 de octubre de 2030 en el caso de Ascó I, fecha de cese definitivo de explotación, mientras que para Ascó II se establece el plazo culmina hasta el 2 de octubre de 2031.
En 2019, la Asociación Nuclear Ascó-Vandellós II (ANAV) solicitó de forma voluntaria participar en el programa del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que analiza y ofrece recomendaciones en aspectos relacionados con la seguridad a largo plazo de las centrales nucleares. La institución dependiente de la ONU clarificó que tanto Ascó I y II como Vandellós II están preparadas para su continuidad según los estándares internacionales.