Fuente: El Economista
La vicepresidenta de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se reunió ayer junto con el ministro de Industria, Héctor Gómez, con una amplia representación industrial de la cogeneración, la cerámica y el sector electrointensivo (siderurgia, refino, materias primas, alimentación y bebidas, entre otros).
En el encuentro, en el que también participaron la secretaria de estado de Energía, Sara Aagssen, y la directora general de Industria, María José Muñoz, se repasó -al igual que sucedió la semana anterior con los representantes del sector eléctrico- el paquete de medidas que se está trabajando en Bruselas por parte de la presidencia española.
Ribera explicó los avances en la normativa de industria sostenible, el paquete de gas, el reglamento del metano, la directiva de eficiencia energética o la situación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.
El sector industrial, por su parte, reclamó al Gobierno que se impongan reglas claras para las ayudas a las industrias en Europa y lamentaron las diferencias que se están produciendo. De hecho, las empresas se quejaron de que solo están tramitándose las ayudas correspondientes al año 2022 mientras que en otros países ya se están cobrando -y en mayor cuantías- las del año 2023.
Por este motivo, la industria pidió que se prorroguen estas ayudas aunque el Gobierno explicó que mientras esté en funciones no dispone de esta capacidad legislativa.
A lo largo de la sesión se pidió también que se amplíen los plazos para el desarrollo de los Perte y se valoró positivamente la adenda que se acaba de aprobar recientemente. El sector siguió lamentando el fuerte incremento de los precios de la energía ya que la electricidad se sigue pagando al doble de precio frente a años anteriores y en el caso del gas natural, los precios son entre cuatro y cinco veces los que se registran en Estados Unidos.
La industria puso sobre la mesa del Ejecutivo los problemas que están atravesando por el shock de la demanda y desgranaron, sector por sector, la incidencia que está teniendo en cada uno de ellos.
Según fuentes consultadas por este diario, el diagnóstico fue en este caso dispar ya que había sectores que se encontraban en mejores condiciones que sus homólogos europeos y otros que, por contra, estaban en peores por las diferencias en los niveles de competitividad.
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Héctor Gómez, -que no tenía el encuentro incluido en su agenda oficial- aludió al discurso del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, sobre su intención de reindustrializar Europa, una propuesta que recibió el apoyo de las asociaciones allí presentes.
La industria se mostró satisfecha por la celebración de este tipo de reuniones con el Gobierno, ya que consideran que es necesario un amplio nivel de interlocución para poder avanzar en las necesidades de cada uno de los sectores durante la presidencia europea.