Fuente: El Economista
El Energy Institute (EI), junto a sus socios KPMG y Kearney, ha publicado una nueva edición del Informe Estadístico (Statistical Review) con los datos energéticos a nivel mundial de 2023. Un año de incertidumbre geopolítica, económica y medioambiental, marcado por un consumo récord de combustibles fósiles y de generación de renovables.
La demanda mundial de energía primaria aumentó un 2% en 2023 respecto al año anterior, hasta los 620 exajulios (EJ). América del Norte, Europa y Asia Pacífico consumieron, en conjunto, el 78% de la energía total mundial (486 EJ). Por su parte, el consumo mundial de combustibles fósiles alcanzó un máximo histórico aumentando un 1,5% hasta los 505 EJ, impulsado por el carbón que subió un 1,6%, el petróleo que se incrementó un 2%, mientras que el gas natural se mantuvo estable.
Las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero relacionadas con la energía en 2023 aumentaron un 2%, superando las 40 gigatoneladas por primera vez en la historia. El 52% del total de emisiones se produjeron en Asia Pacífico, con China como el país más contaminante de la región (y del mundo) con 12.600 millones de toneladas emitidas.
Por tipo de combustible, el informe indica que el consumo de petróleo superó los 100 millones de barriles de petróleo por día (mbpd) por primera vez en la historia. América del Norte aumentó su consumo un 0,8%, la demanda en Europa cayó un 0,8%, mientras que la de Asia Pacífico subió más de un 5%. El precio del brent cayó un 18% hasta un promedio de 83 dólares el barril en 2023, lo que supone un 29% por encima de sus niveles anteriores al Covid, mientras que el uso de gasolina, diésel y queroseno tiende a regresar a sus niveles de 2019 o superarlos.
Por el lado de la oferta, la producción mundial de petróleo aumentó en 1,8 millones de barriles al día en 2023 hasta alcanzar un nivel récord de 96 millones de barriles diarios. EEUU siguió siendo el mayor productor con un crecimiento de más del 8%, mientras que la producción de Rusia disminuyó más del 1% tras un año de sanciones internacionales. América del Sur y Central registraron la tasa de crecimiento más alta (11%) de cualquier región. En Asia Pacífico, la producción de China aumentó un 2% representando alrededor del 57% de la producción total de la región.
Con respecto a las refinerías, la capacidad de refino de China (18.484 kb/d) superó a la de EEUU (18.429 kb/d) por primera vez, convirtiéndose en el mayor mercado de refino de petróleo por capacidad. Sin embargo, el rendimiento de productos refinados de China todavía está por detrás del de Estados Unidos
El consumo de carbón se dispara
Desde los niveles récord registrados en 2022, los precios del carbón cayeron un 46% de media en 2023, con los precios de entrega en Europa en unos 130 dólares/tonelada y los precios de entrega en Asia en 125 dólares/tonelada de media. El consumo mundial de carbón superó los 164 EJ por primera vez en la historia, con un aumento del 1,6% respecto a 2022, con China a la cabeza como mayor consumidor de carbón (56% del total mundial). El consumo de carbón en Europa y América del Norte cayó por debajo de 10 EJ cada uno, siendo sus niveles más bajos desde 1965. Por su parte, la producción mundial de carbón alcanzó su nivel más alto jamás registrado (179 EJ) en 2023, superando el máximo del año anterior. Asia Pacífico representó casi el 80% de la producción mundial y la actividad se concentró en cuatro países: Australia, China, India e Indonesia.
En el caso del gas natural, los precios cayeron en Europa y Asia un 30% desde sus máximos históricos de 2022, con un promedio de 13 dólares/mmBtu, mientras que los precios del Henry Hub en EEUU cayeron un 60%, hasta los 2,5 $/mmBtu durante todo el año, volviendo a su nivel precovid. En 2023, las cuatro regiones responsables del 80% de la producción de gas natural a nivel mundial (América del Norte, Asia Pacífico, Comunidad de Estados Independientes-CEI y Oriente Medio), también lo fueron del 85% de su consumo.
La demanda mundial de gas se mantuvo estable en 2023 y aumentó sólo 1 bcm, insuficiente para recuperar las pérdidas registradas en 2022. En Europa, la demanda de gas natural cayó un 7% (34 bcm) en 2023 hasta su nivel más bajo desde 1994, mientras que en Asia Pacífico creció casi un 2% impulsada por los aumentos de crecimiento del 7% de China e India.
Por su parte, la producción mundial de gas se mantuvo constante en comparación con 2022. EEUU sigue siendo el mayor productor de gas y suministra alrededor de una cuarta parte del suministro mundial. La producción en Europa y CEI cayó un 7% y un 4%, respectivamente. En términos absolutos, la Federación de Rusia experimentó la mayor caída de la producción, con una bajada del 5% (32 bcm).
El suministro de GNL en 2023 creció casi un 2% (10 bcm) hasta 549 bcm. EEUU superó a Qatar como el mayor exportador mundial de GNL y su oferta aumentó casi un 10% frente a la caída del 2% de Qatar. La Federación de Rusia experimentó caídas del 2% tanto en sus exportaciones de GNL como en las de gasoductos.
El crecimiento global de la demanda de GNL fue impulsado principalmente por Asia Pacífico, donde la demanda de China, India y otros países de esta región no pertenecientes a la OCDE aumentó en 11 bcm, 2,6 bcm y 7,6 bcm respectivamente. El GNL enviado tanto a Europa como a los países de Asia Pacífico de la OCDE cayó 3 bcm y 11 bcm, respectivamente. China recuperó su posición como el mayor país importador de GNL del mundo, seguida por Japón y Corea del Sur. Juntos, representaron alrededor del 45% del comercio mundial de GNL.
Por su parte, el comercio neto general de gas natural por gasoductos cayó un 8% (o 35 bcm) en 2023. Las importaciones europeas de gasoductos cayeron un 26% (40 bcm), atribuible casi en su totalidad a los suministros de Rusia, que representaron el 91% de la caída.
La participación de las energías renovables en el consumo total de energía primaria alcanzó el 14,6%, un aumento del 0,4% respecto al año anterior. La capacidad solar y eólica siguió creciendo rápidamente en 2023, superando el récord del año anterior de 276 GW en unos 186 GW, un aumento del 67%. La energía solar representó el 75% (346 GW) de la nueva capacidad y China fue responsable de alrededor de una cuarta parte del crecimiento. Europa instaló poco más de 56 GW de energía solar, lo que representa el 16% del total de nueva capacidad solar. La energía eólica logró un año récord para nuevas construcciones con más de 115 GW puestos en funcionamiento. Casi el 66% de la nueva capacidad se produjo en China y su capacidad instalada total ahora es igual a la de América del Norte y Europa juntas. Aunque Europa tiene la mayor proporción de energía eólica marina en su cartera (12%), China tiene 37 GW frente a los 32 GW de Europa.