Fuente: El Economista
Europa prepara el terreno para afrontar el próximo invierno. Y si las suaves temperaturas han propiciado ayudado a garantizar la seguridad energética este ejercicio, Bruselas se prepara para el próximo año. La comisaria de Energía, Kadri Simson, ha anunciado este jueves que pedirá a los Estados miembro extender la reducción del 15% de consumo de gas al próximo año.
Lo ha anunciado en el marco de la comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo, donde ha indicado que propondrá a los Estados miembro prorrogar ese recorte de la demanda de gas del 15% para el año que viene. “Ha funcionado bien y es garantía para lograr un buen almacenamiento en los Estados”, ha considerado Simson.
“Ha habido una reducción del consumo de gas, todos los países se comprometieron a hacerlo en un 15% y lo han hecho”, ha contextualizado la comisaria estonia, que ha matizado que en algunos casos la cifra asciende al 19% y ha hecho hincapié que entre agosto y enero la UE ha ahorrado 42.000 millones de metros cúbicos de gas.
Fue el pasado verano cuando los países de la UE acordaron reducir su demanda de gas un 15% respecto al consumo medio de los últimos cinco años para el periodo entre el 1 de agosto hasta el 31 de marzo de este ejercicio. Una reducción, propuesta por el Ejecutivo comunitario, que se articularía como voluntaria y que incluye una cláusula para que la Comisión pueda hacer tal recorte obligatorio en caso de considerar necesario activar la alerta de seguridad de suministro.
La medida tenía como objetivo garantizar la seguridad energética durante el invierno. En este sentido, la comisaria de Energía ha explicado que las reservas de gas en el subsuelo han descendido del 95% en noviembre al 57% actualmente, una cifra que en todo caso duplica las registradas el año anterior. “Lo hemos hecho todo sin echar por tierra el Pacto Verde”, ha dicho Simson que ha destacado que se ha generado más actividad verde y solar que el año interior.
Además, Simson ha abogado por no utilizar más gas natural licuado ruso “una vez que expiren los contratos actuales” y que “no se renueven los contratos existentes con Rusia”, como forma de garantizar que no haya cortes de suministro de gas.
La comisaria estonia ha puesto en valor la diversificación de las fuentes de suministro de gas ruso, cuyas importaciones de gas por gasoducto han bajado hasta el 8% actualmente desde el 60% que copaba el pasado ejercicio y que hacía que Moscú fuera el principal proveedor de gas natural de la UE. Una balanza que se ha inclinado ahora hacia Noruega.
La UE, ha aclarado Simson, también ha incrementado su capacidad de importación de gas natural licuado, con la apertura de 3 terminales a las que se sumarán otras 5 hasta finales de año y que harán que la capacidad de importación comunitaria de gas natural licuado ascienda a 50.000 millones de metros cúbicos (50 bcm).
“Tenemos que poner fin a la dependencia brutal con Rusia”, ha incidido Simson, que ha dicho que para tal fin se ha puesto en marcha el RePower EU y ha puesto en valor el recorte de tal dependencia.